Esta vez, por especial recomendación del compañero Luís Llavori, os presento la obra del fotógrafo canadiense Paul Zizka. Su obra se centran especialmente en el paisaje de montaña y deportes de aventura. Generalmente, la majestuosidad con la que suele vestir sus imágenes proviene de luces mágicas, encuadres arriesgados y composiciones donde la escala te hace sentir insignificante ante el paisaje.
La figura humana es un elemento que todo paisajista intenta de evitar en sus encuadres. Pues bien, cuando descubres la obra de Paul, te das cuenta de la importancia que tiene este elemento para dimensionar el paisaje y llenar las escenas de romanticismo.
Aunque siente predilección por el paisaje de montaña, en su web también podéis disfrutar de fauna. Podréis observar, como el estilo de este canadiense trata siempre de enmarcar a cada especie en la magnitud de su hábitat.
Os dejo el enlace de su fantástica web:
Perdonarme porque este fotógrafo me pasó desapercibido. Tiene un estillo precioso, unos encuadres que se salen de lo común, que destacan sobradamente entre la multitud de fotos que hay en internet da gusto ver su trabajo. Me identifico plenamente con este estilo de fotos. Felicidades a Paul.