Todos tenemos en nuestro imaginario particular una lista de sitios que queremos fotografiar. Algunos son destinos posibles, otros solamente deseos, pero todos suelen ser el resultado de ver las mismas imágenes de los mismos lugares tomadas por los mismos fotógrafos y luego por otros que siguen sus pasos, y así sucesivamente. El resultado es un encasillamiento que podemos convertir en oportunidades creativas.
Este año he podido visitar Japón, un país que nunca ha estado en mi lista, pero al que en poco tiempo me animé a ir por diferentes motivos. En el imaginario colectivo del gremio fotográfico Japón es sinónimo de grullas en paisajes nevados, macacos en aguas termales y escenas de arcos orientales en medio de mares sedosos.
Con toda la intención de evitar esas imágenes, pero con mucha curiosidad por ver el Japón menos conocido, planeé mi viaje por una de las islas del sur del país recorriendo poca distancia, con tiempo para detenerme y explorar, viendo menos pero estando más.
A la vuelta, mis fotos han resultado ser muy poco japonesas: detalles de rocas y arroyos, alguna cascada y poco más. Motivos presentes en muchas otras partes del mundo y que todos ciertamente hemos captado repetidamente.
Sin embargo, este ha resultado mi viaje fotográfico más interesante y motivador. Mi sensación ha sido la de visitar otro planeta, formado por los mismos elementos que conocemos pero dispuestos de un modo distinto por causa de una geología y un clima propios. Así, los sentidos del fotógrafo detectan formas y colores nuevos. El agua es diferente, también las copas de los árboles, la hierba y el musgo sobre las rocas. Hasta los olores son nuevos. El resultado han sido horas absorto y concentrado detrás de la cámara.
Yo también comparto tu visión, «gracias» a las redes sociales, la gente intenta ir a los lugares más espectaculares y traerse esas fotos de auroras boreales y gralciares que ve en las redes, con lo cual al final siempre se ven las mismas fotos, y eso es aburrido, no es fotografía personal o de autor. Eso es masificación de lugares y masificación de fotos y iguales, lo que es igual a aburrimiento. El planteta está lleno de lugares espectaculares, pero la gente no va a verlos por falta originalidad, curiosidad, comodidad, etc… Y que conste que yo soy el primero que estoy deseando fotografiar una aurora boreal, pero también me interesan otros lugares y otras fotos diferentes.
Felicito desde aquí a Jesús Rodriguez por su apasionada reflexión en nuestro blog.
Comparto todo el trasfondo de su post, en concreto sus dos ideas principales: se puede viajar a un país exótico e intentar salirse de los estereotipos fotográficos; y es una buena opción plantearse un «slow Travel” para obtener fotografías que se impregnen de nuestras vivencias en ese país.
Y por la fotografía que nos muestra Jesús en el post, seguro que los resultados le han acompañado.
Lo fácil hoy en día es salir y hacer esas fotos que, vistas en algún sitio (redes, blogs, webs,…), resultan atractivas a la vista y al gusto, sobretodo en fotografía de paisaje. Todo está en encontrar la localización del lugar y, cuando uno puede, ir a por ello. Es verdad que se pueden obtener resultados muy diferentes de un mismo lugar, pero es casi como que el trabajo ya se te da hecho.
En el caso del viaje de Jesús a Japón, a pesar de ser fotógrafo paisajista, la opción que ha tomado ha sido la difícil, escapando de lo «cotidiano» y buscando otra vuelta a su ruta por tierras niponas.
Felicidades por la apuesta!
Bonita entrada cargada de razones, buenas razones.
A mí siempre me asalta una cuestión ante un viaje fotográfico.
Haces miles de km para llegar a tu destino, no te vas a traer aunque sea para ti esas “postales” icónicas identificarías de un lugar? A mí modo de ver sería un craso error. Aunque reconozco que en mirar de otra forma y hacia otra dirección refuerza la diferenciación. De lo contrario con que solo un fotógrafo vaya por allí sobraría.
Me sumo a tu reflexión de que con tiempo la cosa siempre va mejor.
Muy de acuerdo con todos. Mis temas son las aves, aunque intento encontrar algo diferente, aún no he dado con ello. Espero conseguir algún día la inspiración para lograrlo… Pedro espero poder ver pronto esas imágenes. Un saludo.