Miedo, inseguridad, inmediatez, dudas, desconocimiento, aceptación… Cualquiera de estos términos caben a la perfección a la hora de enfrentarse a nuevos retos. Y si hablamos de fotografía con más razón.
Hasta la fecha he venido haciendo casi exclusivamente fotografía de naturaleza centrado en el paisaje. Primero fue más documental, ahora más personal, íntimo, de autor. Desde siempre me he visto atraído por el mundo natural, el mundo de los más pequeños. Descubrir comportamientos ocultos, desconocidos; belleza efímera, breve, temporal y caduca.
Estoy en un cruce de caminos, una elección que tomar, una dirección que seguir. He decidido ampliar mis conocimientos, mis habilidades, mi manera de mirar y transmitir lo que siento al enfrentarme a un nuevo reto.
La macrofotografía es mi elección…¿Por dónde empezar? La respuesta es sencilla, aunque el camino será duro: Formación y asesoramiento. Preguntarle a los mejores, a aquellos que han abierto camino, a los referentes que me han venido dejando boquiabierto con cada nuevo trabajo publicado.
Hace unos meses anduve de la mano de un buen compañero por el interior de esta tierra amada nuestra que es España, un amigo de esos de los que te dejan con la boca abierta cuando ves un nuevo trabajo, un nuevo proyecto con su firma debajo.
No imaginaba lo que me esperaba, una explosión de vida allá por donde fijaras la vista. He de reconocer que no había visto tanta mariposa junta desde que camino por La Tierra. No sabía dónde fijar mi atención, casi ni qué hacer, estaba sobrepasado por el momento que estaba viviendo.
Después de muchos intentos, posturas imposibles, pruebas y fallos logré dar con una foto que me ha llenado y ahora ve la luz. Digo que me ha llenado porque hasta el momento estaba vacío de contenido de esta disciplina. Espero que sea el inicio de un nuevo mundo por descubrir con paciencia y humildad.
Como rúbrica final comentar que esta fotografía ha sido recientemente premiada en un concurso de ámbito regional. ¿Significará que voy por el buen camino?
David Frutos Egea – 2020
Amigo David
si creo que vas por el buen camino, porque plantearte «retos» es el camino hacia la superación.
Claro que la fotografía te puede servir para expresar tus sentimientos a través de la representación de la belleza natural.
Espero poder asistir a tu próximo «cruce de caminos» donde quieras expresar tus opiniones sobre el mundo. Ya lo expresó perfectamente Man Ray: “Sabía que siempre habría quién se fijara únicamente en la técnica preguntándose ¿cómo?, mientras que otros, más curiosos por naturaleza, se preguntarían ¿porqué?” .
Arrieros somos y en el camino nos encontraremos.
Ánimo David, estás en el buen camino
Muchas gracias tus animadas palabras Koldo.
En la zona donde vivo, cuando llega la época de mayor riqueza en insectos, también llega el calor, otro obstáculo a vencer. A estos pequeños seres les encanta el calor y no paran quietos.
Habrá que seguir estudiando para lograr los objetivos.
Un abrazo!